Cada vez que se acerca esta época del año, se agudizan las discusiones en el sector frutícola, que como hemos mencionado varias veces en este medio, la crisis se profundiza año a año y pareciera que nadie atiende el conflicto.
Las cámaras frutícolas FEDERCITRUS (cítricos), CAFI (peras y manzanas), ABC (arándanos) y CAPCI (cerezas), solicitaron “eliminar los derechos de exportación e incrementar a sus valores originales los reintegros de las posiciones del Capítulo 08 de la Nomenclatura Común del MERCOSUR (N.C.M.)”.
Las entidades mediante un comunicado expresaron que deberán tomarse medidas inmediatas para paliar el estado de crisis terminal que afecta al sector, y donde además, reclaman “establecer un plazo mayor para abonar los derechos de exportación de todas las posiciones NCM citadas (mínimo 120 días) como forma de aliviar la carga financiera de los exportadores de frutas frescas y productos agroindustriales”.
Las frutas quedaron grabadas con el máximo de $4, situación que fue reconocida como un error en innumerables reuniones con los distintos Ministerios y Secretarías del Gobierno Nacional dado que “se reconoce al sector como un sector de alto valor agregado, con lo cual, el máximo tributo a la exportación debería ser de $3 por dólar.
El sector frutícola en el 2008 había alcanzado 1.500.000 toneladas de fruta de exportación mientras que en 2017 la cifra fue de 750.000 toneladas, o sea que se perdió el 50% del volumen exportado. “No podemos permitir que esto siga ocurriendo. Existe potencial para crecer pero necesitamos medidas que nos hagan competitivos y que incentiven a los sectores a invertir generando más puestos de trabajos y mejorando las economías de provincias, en muchos casos con altos índices de pobreza”.
“Apelamos a que en lo inmediato se produzcan estos cambios solicitados y se evite así, un daño mayor a un sector de la economía nacional que viene sufriendo la falta de competitividad y que además genera más de 150.000 puestos de trabajo (1 trabajador por ha), con producciones en más de 10 economías regionales que exportan valor agregado argentino a más de 70 países y genera más de u$s 1900 millones de divisas para el país”, concluyeron.
Las advertencias al gobierno nacional y a las tan mencionadas mesas de competitividad fueron varias, y aún no existe respuesta concreta para no solo paliar la crisis terminal, sino que tampoco hay propuestas ni programas de largo plazo que apunten a mejorar y restablecer las economías regionales que se vienen a pique, para los pequeños y medianos productores.
Lo que hay que dejar en claro que en tiempos de crisis siempre existe un ganador a expensas de una inmensa cantidad de perdedores, la especulación financiera y el aumento de precios de los servicios son los hechos que demuestran hacia donde apunta la política económica en estos tiempos.
Siguen las advertencias, seguirán los conflictos, habrá que ver la oportunidad en medio de la crisis.