Algunos dicen que las diferencias entre Diciembre y Enero son sólo supersticiones para levantar el ánimo, que por más brindis y deseos que haya el 31 de diciembre a las 23:59 hs no difiere para nada del 1° de Enero a las 00:01 hs. Sin embargo, en esta Argentina de cambios encontró un fuerte escalón entre el último mes del año y el primero del siguiente en materia de economía internacional.
Es que desde que Donald Trump asumió como presidente del país del Norte, la Argentina no le ha encontrado la vuelta a comercializar con el ex primer promotor del Libre Mercado. Parece que el actual primer mandatario estadounidense hubiese tomado nota del explícito apoyo de su colega argentino hacia su rival Hillary Clinton.
En Diciembre la noticia era que Argentina retornará desde el 1º de Enero de 2018 al Sistema Generalizado de Preferencias (SGP) para exportaciones a los Estados Unidos, luego de seis años. Lo que promete que algunos productos de las economías regionales puedan ingresar en el mercado norteamericano con arancel cero.
La Cancillería oficializaba el anuncio anticipando que esta medida beneficiará a medio millar de manufacturas argentinas, como los vinos, artículos de confitería sin cacao, conservas de carne, aceite de oliva, quesos, maníes y frutillas.
El SGP consiste en el otorgamiento de preferencias arancelarias por parte de países desarrollados a determinados productos exportados desde países en vías de desarrollo, que reciben tratamientos preferencial y reducciones arancelarias significativos. Y el ministro de Agroindustria, Luis Miguel Etchevehere, señalaba: «se trata de un gesto muy significativo del gobierno del presidente Trump hacia la Argentina, no sólo por el impacto sobre la producción y las exportaciones, particularmente en las economías regionales y en productos de agregado de valor, sino también por lo que significa para las relaciones bilaterales con Estados Unidos».
Sin embargo, no llegó a pasar una semana del Enero renaciente de 2018, para que desde la Casa Blanca se ratifiquen y aumenten los aranceles al biodiesel argentino. Recordemos que la primera sanción contra el biodiésel argentino en Agosto pasado, fue 57% en aranceles provisorios, luego en Noviembre se aplicó más de un 70%, para finalmente rondar el 71 al 72%, en este sofocado Enero de 2018.
Por lo que el titular de la Cámara de Biocombustibles (Carbio), Luis Zubizarreta, consideró “es clave que el Gobierno recurra a la Organización Mundial del Comercio (OMC), no hay otro camino”. Esperando el mismo resultado positivo que tuvo el fallo contra la Unión Europea. “La medida absolutamente proteccionista de Estados Unidos se esperaba pero no por eso deja de ser injusta e irracional y sin asidero técnico y jurídico”, agregó en diálogo con Télam Radio.
El mundo está cambiando, en crisis, en un sistema que no soporta lógica y que muchas veces predica lo que no hace. El sistema se resquebraja y en tiempos de postverdades y revuelo informativo, todo se vuelve efímero y cambiante, o quizás sea el método de subordinación de D. Trump: “Caricia y Golpe”, aunque siempre el segundo más fuerte que el primero.