Nota de Elaboración Propia- OBRA
La vitivinicultura Argentina no está pasando por su mejor momento, varias son las razones que reflejan esta situación. Las estadísticas asustan y el paquete de reformas anunciadas por Mauricio Macri respeto a la aplicación de un gravamen a la venta de vinos e incluso de espumantes ponen en jaque a todos los actores de la cadena.
Por un lado encontramos que los principales parámetros de comercialización vienen en baja, según el INV en el acumulado de enero a septiembre la comercialización total de vinos fraccionados tanto en mercado interno como externo presenta una caída interanual un 5,4% respecto a mismo periodo del año anterior. En mercado interno se han comercializado 6.690.647 Hl un 5,1% menos que los 7.047.385 Hl que ofrecieron en el ciclo mencionado.
Las exportaciones no logran revertir su tendencia negativa, las ventas al exterior de fraccionado también disminuyeron en el mismo período pasando de 1.563.615 en 2016 a 1.457.067 en 2017, más aún, las ventas a granel se redujeron un 41 %. Además nuestra posición en el mundo también se ha modificado, pasamos de ser los 4° a ubicarnos en el 6° lugar en la elaboración mundial de vino, a la fecha la elaboración es de 11.269.127 Hl. con una leve recuperación respecto a la elaboración del ciclo pasado que fue la más baja producto de la peor cosecha en los últimos 50 años pero aún distante de la media nacional histórica.
Otro duro golpe para esta economía regional es la disminución en consumo el cual se encuentra cercano a los 24 lts per cápita muy lejanos a los casi 90 lts que en algún momento supimos tener, aunque se haga hincapié es que se bebe menos pero con mayor calidad uno de los factores de esta mala performance puede está vinculado con los aumentos de precios de los vinos, que subieron en mayor proporción que los de un competidor directo, como la cerveza. Todo esto sin considerar el aumento en los costos que están teniendo los productores en los primeros eslabones de la cadena.
Y como si fuera poco, lo que parecían rumores con muy poca certeza respecto a las reformas tributarias e impositivas propuestas desde el gobierno nacional ayer se hicieron efectivas hoy cuando se confirmó efectivamente que el impuesto al vino pasara de 0% al 17%. Este incremento a la presión tributaria genero el rechazo de las entidades relacionadas con esta producción.
Esta reforma impositiva profundizará más la situación ya que acentúa la disminución en el consumo. En su comunicado la Asociación de Cooperativas Vitivinícolas (ACOVI) señaló «Nos llama fuertemente la atención este impuesto luego de los encuentros que el sector ha mantenido con el gobierno nacional en los cuales se ha explicado y transmitido las características y realidad de la vitivinicultura y las bondades para la salud de nuestro producto». Por su parte la federación agraria también expresó su postura frente a esta situación: “Esto sería un golpe de gracia para muchos productores de la región. Somos un sector que ya viene muy golpeado por años de malas políticas y contingencias climáticas, como granizo, heladas o excesos de lluvias», dijo la filial Mendoza. «Es una medida que desalienta el consumo y la producción», agregó.
Aunque su discurso, el presidente enfatizó en la responsabilidad fiscal, la promoción del empleo el fortalecimiento de la república y la calidad institucional, para los principales referentes de la actividad vitivinícola esta noticia no hace más que perjudicar y profundizar la crisis por la que atraviesa el sector, menor producción, menor elaboración, baja en el consumo y en la exportación y para variar aumento en los impuestos.. sobre llovido mojado?.